LA MECÁNICA DEL CORAZóN de Mathias Malzieu
La historia comienza una fría noche en 1874 (S. XIX)en Edimburgo. Allí nacerá Jack, hijo de una joven prostituta.
Un bebe con un corazón débil que necesita un mecanismo nuevo para sobrevivir.
Para salvarlo, le colocarán un reloj mecánico de madera para dar cuerda toda su vida. La prótesis funciona y Jack sobrevive, pero debe respetar una regla: evitar todo tipo de emoción que pueda alterar su corazón. Nada de enfados ni sobresaltos y por supuesto: evitar enamorarse.
Jack sufrirá el ser excluido de la sociedad, puesto que no puede salir de su hogar.
Sin embargo, el día de su cumpleaños la doctora que lo cuida desde el abandono de su madre le permite dar un paseo en la ciudad. Allí dando un paseo, escucha la voz de una cantante andaluza (Miss Acacia).
Una mujer de ojos enormes y algo miope de la se enamorará de ella perdidamente.
Jack se embarcará en una maravillosa aventura que le llevará a París y a Granada, conociendo a diversos personajes muy peculiares.
Conocerá las amarguras y las alegrías que conlleva el amor.
Mathias Malzieu, un francés nacido en Montpellier en 1974 .
Empezó en el mundo de la musica, era el líder de la banda francesa: Dionysos. ‘La mecánica del corazón’ es el sexto trabajo de la banda, que dió origen al libro o puede que al contrario.
“Primero, no toques las agujas de tu corazón. Segundo, domina tu cólera. Tercero y más importantes, no te enamores jamás de los jamases. Si no cumples estas normas, la gran aguja del reloj de tu corazón traspasará tu piel, tus huesos se fracturarán y la mecánica del corazón se estropeará de nuevo”.
“Algún día es posible que tengas que pagar un precio muy alto por todo el placer y la alegría que el amor provoca. Y cuanto más intensamente ames, más intenso será el dolor futuro”.
“Si tienes miedo de hacerte daño, aumentas las probabilidades de que eso mismo suceda”.
“No hay nada más divertido que la imprudencia”.
“Las penas amorosas pueden transformar a la gente en monstruos de tristeza”.
“Me siento invenciblemente feliz”.
“La máquina de los sueños se pone de nuevo en marcha, lentamente”.
“El tiempo parece haberse detenido y no quiero que retome su curso habitual”.
“La mecánica del corazón no puede funcionar sin emociones”.
“Esta noche me encaramaré a la luna, me instalaré en su cruasán como si estuviera en una hamaca y no tendré ninguna necesidad de dormir para soñar”.
“Por mucho que uno se deleite con la luna también necesita del sol”.
“Continúa soldando tus sueños a la realidad”.
“Me gustaría parecer fuerte pero me derrumbo por todas partes”.
“Siempre se produce un momento patético pero agradable en el que pienso que mis sueños pueden hacerse realidad. En ese momento creo en lo imposible”.
“A la gente no le gustan las cosas demasiado diferentes, y menos aún las personas que se creen diferentes. Aunque las aprecien como espectáculo, se trata solo del placer del mirón”
“Lo mismo te pasará a ti. Disfrutarán, tal vez, contemplando tus males cardíacos, pero nunca te querrán por los que eres”.
“¿La amaba demasiado? ¡Nunca se ama demasiado! ¿La amaba mal? No lo sé”
“Volver al tiempo en que amaba sin estrategias, cuando me arrojaba de cabeza sin miedo a estrellarme contra mis sueños. ¡Volver! La época en la que no tenía miedo a nada, en la que podía subirme al cohete rosa del amor sin abrocharme al cinturón”
“Esta vez no le daré solo la llave, sino el corazón entero, con la esperanza de que le apetezca de nuevo reparar el amor conmigo. (…) Es un momento precioso. ¡Regalarle un paquete con el verdadero corazón de uno a la mujer amada no es poca cosa!”